sábado, 6 de enero de 2018

Epifanía del Señor

 
Los Reyes Magos, Rávena.
      El acto principal de salvación fue el nacimiento. Nadie puede decir qué día nació Dios de Santa María siempre Virgen. Por ese motivo algunas confesiones, como la ortodoxa no celebran la Navidad, pero sí la Epifanía, el día en que los Reyes Magos adoraron a Dios hecho hombre, el día de su presentación al mundo. Oro, mirra e incienso sus regalos-símbolo.
     Emulando aquel acto importantísimo para el mundo, existe la tradición de dar regalos a nuestros seres queridos y cercanos; de tal modo se extendió la tradición que tras la paganización de la humanidad occidental se ha seguido llevando a cabo dicha tradición. Hay que reconocer que el dar regalos un día concreto no es un hecho cristiano, pero el hacerlo el día de la Epifanía sí. De ahí que para los cristianos nos sea grato poder repetir aquel gesto con aquellos que nos rodean.
     Este año he regalado a los más cercanos: padres, hermano y novia, y he colaborado con los regalos de sus padres. Para mi padre la Guía Peñín de vinos, para que mi padre pueda guiarse entre la gran cantidad de vinos que tenemos en esta tierra sagrada; además, ya que es un gran aficionado al bricolaje, le he comprado un atornillador con un soporte especial para no usar la mano sujetando el tornillo. A mi madre, un bolso que rompía bastante con los que tiene, un fular, un llavero y un bolso para guardar el maquillaje y poder llevarlo cuando viaja. A mi hermano, un libro: Los bosques ibéricos, un buen complemento para sus estudios de ingeniería forestal (seguro que se lo engulle), y dinero para ayudarlo con la empresa que está montando. A mi amor le he regalado por partida doble, pues para su cumpleaños tenía los bolsillos vacíos y no pude hacerle ningún detalle: le he comprado los cómics que le faltaban para completar una colección de Wonder Woman, una caja con dos muñecos: Batman y Superman, sus primeras miniaturas de un juego de batallas con miniaturas, un póster y chucherías .
     A mí me han regalado algo de ropa, unos libros, un almanaque casero muy chulo, con referencias a la mitología nórdica y a Hijos de la Anarquía (serie), dinero para comprarme el juego ¡Sí, Señor Oscuro! y un tocadiscos portátil. Estoy muy contento. No esperaba tanto.
     Al final, lo que más se valora en este día no es la calidad y cantidad, sino el esfuerzo y el interés. Nunca he querido recibir ni hacer regalos por el simple hecho de regalar. Lo interesante, lo valorable de verdad, es que la persona desee y se haga feliz. El almanaque casero que me han regalado está hecho en procesador de textos, en un rato, imprimido y plastificado, el más barato y el más bonito. Un maestro que tuve nos dijo una vez que nos había regalado unas chucherías: es más feliz el que regala que el que recibe. Así es. Al margen de creencias (aunque las que dieron pie a la tradición del día de hoy sean importantísimas), el valor que adquiere el gesto de intentar dar algo de nosotros (el esfuerzo que puede suponer un gasto del dinero ganado con nuestro trabajo) a alguien sólo por el amor que le profesamos es incalculablemente mayor que el propio esfuerzo que cueste, sea el de una naranja o el del coche más caro. Ni el objeto más caro superará el valor de lo que se hace por amor.
     Pero, retomando el comienzo del artículo, quiero acabar con el recuerdo de que precisamente fue el Amor quien nos trajo aquí, y es por él por quien hoy nos regalamos. Espero, de todo corazón, que hoy alguien se haya acordado de vosotros.


In You, I Have Taken Refuge
Never Let Me Be Put To Shame
As You Are Righteous Rescue Me And Save My Life
Hear Me And Set Me Free
Be A Rock Of Refuge For Me,
Where I May Ever Find Safety At Your Call
For You Are My Towering Crag And Stronghold
O Lord , Keep My Life Safe From The Wicked

You Are My Hope, O Lord, My Trust, O Lord, Since Boyhood
From Birth I Have Leaned Upon You
My Protector Since I Left My Mother's Womb

Let All My Traducers Be Shamed And Dishonored
Let All Who Seek My Hurt Be Covered With Scorn
But I Will Wait In Continual Hope
I Will Praise You Again And Again
All Day Long Your Righteousness, Your Saving Acts,
Shall Be Upon My Lips
You Shall Ever Be The Theme Of My Praise
Your Righteousness, Yours Alone

You Are My Hope, O Lord, My Trust, O Lord, Since Boyhood
From Birth I Have Leaned Upon You
My Protector Since I Left My Mother's Womb

For You Have Done Great Things
Who Is Like You?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta aquí, si no te sientes mal

No te pierdas...

1984, de George Orwell. II La Policía del Pensamiento.

      "Si tanto el pasado como el mundo externo existen solo en la mente y esta es controlable... ¿qué nos queda?" 1984 , Ge...

Las más vistas

Estrella Polar.

Estrella Polar.
Podéis pedirme vuestro ejemplar